CEREMONIA POR LOS DIFUNTOS
El próximo
4 de noviembre haremos en el dojo una ceremonia en memoria de los
difuntos. La ceremonia en sí es muy sencilla, el texto que se recita es el Daishin Darani,
dedicado a Avalokiteshvara, Kannon, el bodhisatva de la compasión , y durante el mismo es posible acercarse al altar y quemar
incienso. Al final, en la dedicatoria del texto recitado, se citan los nombres
de las personas a quién se dedica especialmente la ceremonia. Si no vais a estar ese día podéis enviar por mail el nombre de alguna persona que queráis que se incluya.
Si bien aprovechamos una fecha que para
nosotros es más evocadora, alrededor del 1 de noviembre, Todos los Santos, o incluso la
fiesta celta de Samhain, señalar que esta ceremonia se inscribe en un universo completamente distinto.
La persona que ha fallecido como amiga, como ancestro, raíz que nos une a nuestros orígenes,
que tiene que partir, pues nada ni nadie puede sustraerse a ese dato
fundamental, base de la reflexión del mismo Buda, y
que en la despedida le agradecemos el tiempo que hemos pasado juntos, los
cuidados que ha tenido con nosotros, y le deseamos buena continuación de su viaje, hacia no sabemos donde. en todo caso nada que ver
con los patéticos fantoches con que nos
bombardean en estas fechas, como si los muertos no tuvieran otra cosa que hacer
que espantar a los vivos.
La ceremonia invita a integrar su recuerdo
con respeto, con benevolencia, de hecho en general cada persona se dirige a los
seres queridos con los que ha tenido una relación
real, y es en base a esa relación real que nos
dirigimos a ellos, tampoco buscando su amparo, sino haciéndoles un último presente, en forma de ese incienso que al quemarse, al igual
que nosotros,no deja huella de su existencia
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Sanpai.